Y el Espï¿¿tu y la Novia dicen: "Ven". Y el que oye, diga: "Ven". Y el que tiene sed, "venga"; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.               Apoc. 22:17

 

 

 

 

 

 

  ~ EL DEVER DEL CRISTIANO ~ 

CUAL ES EL DEVER DEL PASTOR?

El Pastor deve de Instruir a las obejas hasta convertirlas en Pastores, para que ellas tambien salgan a predicar y EL CUERPO DE CRISTO cresca y se multiplique.

Dt. 6:4-9 4 Oye, Israel: Jehova nuestro Dios, Jehova uno es. 5 Y amaras a Jehova tu Dios de todo tu corazon y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. 6 Y estas palabras que yo te mando hoy, estara sobre tu corazon siempre 7 y las repetiras a tus hijos, y hablaras de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. 8 Y las ataras como una seï¿¿en tu mano, y estaran como frontales entre tus ojos; 9 y las escribiras en los postes de tu casa, y en tus puertas.

Dt. 6:17-18 17 Guardad cuidadosamente los mandamientos de Jehova nuestro Dios, y sus testimonios y sus estatutos que te ha mandado. 18 Y haz lo recto y bueno ante los ojos de Jehova para que te vaya bien, y entres y poseas la buena tierra que Jehova urï¿¿tus padres;

Jos. 1:8 8 Nunca se apartarte de tu boca este libro de la ley, sino que de dia y de noche meditaras en el para que guardes y hagas conforme a todo lo que en elesta escrito; porque entonces haras prosperar tu camino, y todo te saldra bien.

Jos. 8:32-35 32 Tambien escribiras ¿lï¿¿obre las piedras una copia de la ley de Moises la cual escribiras delante de los hijos de Israel. 33 Y todo Israel, con sus ancianos, oficiales y jueces, estaba de pie a uno y otro lado del arca, en presencia de los sacerdotes levitas que llevaban el arca del pacto de Jehova asi los extranjeros como los naturales. La mitad de ellos estaba hacia el monte Gerizim, y la otra mitad hacia el monte Ebal, de la manera que Moises siervo de Jehova lo habia mandado antes, para que bendijesen primeramente al pueblo de Israel. 34 Despues de esto, leyes das las palabras de la ley, las bendiciones y las maldiciones, conforme a todo lo que esta escrito en el libro de la ley. 35 No hubo palabra alguna de todo cuanto mandï¿¿isï¿¿ que Josuï¿¿o hiciese leer delante de toda la congregaciï¿¿e Israel, y de las mujeres, de los niï¿¿ y de los extranjeros que moraban entre ellos.

2Sam. 22:31 31 En cuanto a Dios, perfecto es su camino, Y acrisolada la palabra de Jehovï¿¿nbsp; Escudo es a todos los que en ï¿¿esperan.

Sal. 1:22 Sino que en la ley de Jehovï¿¿stï¿¿u delicia,  Y en su ley medita de dï¿¿y de noche.

Sal. 12:66 Las palabras de Jehovï¿¿on palabras limpias, Como plata refinada en horno de tierra, Purificada siete veces.

Sal. 19:7-11 7 La ley de Jehovï¿¿s perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehovï¿¿s fiel, que hace sabio al sencillo. 8 Los mandamientos de Jehovï¿¿on rectos, que alegran el corazï¿¿El precepto de Jehovï¿¿s puro, que alumbra los ojos. 9 El temor de Jehovï¿¿s limpio, que permanece para siempre; Los juicios de Jehovï¿¿on verdad, todos justos. 10 Deseables son mï¿¿que el oro, y mï¿¿que mucho oro afinado; Y dulces mï¿¿que miel, y que la que destila del panal. 11Tu siervo es ademï¿¿amonestado con ellos; En guardarlos hay grande galardï¿¿/span>

Sal. 93:5 5 Tus testimonios son muy firmes; La santidad conviene a tu casa, Oh Jehovï¿¿por los siglos y para siempre.

Sal. 119:9, 11, 18 9 ï¿¿Con quï¿¿impiarï¿¿l joven su camino?  Con guardar tu palabra.  11En mi corazï¿¿e guardado tus dichos, Para no pecar contra ti.  18 Abre mis ojos, y mirarï¿¿as maravillas de tu ley.

Sal. 119:89-93 89 Para siempre, oh Jehovï¿¿Permanece tu palabra en los cielos. 90 De generaciï¿¿n generaciï¿¿s tu fidelidad; Tï¿¿rmaste la tierra, y subsiste. 91Por tu ordenaciï¿¿ubsisten todas las cosas hasta hoy, Pues todas ellas te sirven. 92 Si tu ley no hubiese sido mi delicia, Ya en mi aflicciï¿¿ubiera perecido. 93 Nunca jamï¿¿me olvidarï¿¿e tus mandamientos, Porque con ellos me has vivificado.

Sal. 119:97-100 97  ï¿¿Oh, cuï¿¿o amo yo tu ley! Todo el dï¿¿es ella mi meditaciï¿¿98 Me has hecho mï¿¿sabio que mis enemigos con tus mandamientos, Porque siempre estï¿¿ conmigo. 99 Mï¿¿que todos mis enseï¿¿res he entendido, Porque tus testimonios son mi meditaciï¿¿100 Mï¿¿que los viejos he entendido, Porque he guardado tus mandamientos;

Sal. 119:104-105, 130 104 De tus mandamientos he adquirido inteligencia; Por tanto, he aborrecido todo camino de mentira.  105 Lï¿¿ara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino.  130 La exposiciï¿¿e tus palabras alumbra; Hace entender a los simples. Pr. 30:5-6 5Toda palabra de Dios es limpia; El es escudo a los que en ï¿¿esperan. 6 No aï¿¿s a sus palabras, para que no te reprenda, Y seas hallado mentiroso.

Is. 55:10-11  10 Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allï¿¿sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come, 11 asï¿¿erï¿¿i palabra que sale de mi boca; no volverï¿¿ mï¿¿acï¿¿ sino que harï¿¿o que yo quiero, y serï¿¿rosperada en aquello para que la enviï¿¿/span>

Jer. 15:16 16 Fueron halladas tus palabras, y yo las comï¿¿y tu palabra me fue por gozo y por alegrï¿¿de mi corazï¿¿porque tu nombre se invocï¿¿bre mï¿¿oh Jehovï¿¿ios de los ejï¿¿itos.

Jer. 23:29 29ï¿¿No es mi palabra como fuego, dice Jehovï¿¿y como martillo que quebranta la piedra?

Dn. 10:21 21 Pero yo te declararï¿¿o que estï¿¿scrito en el libro de la verdad; y ninguno me ayuda contra ellos, sino Miguel vuestro prï¿¿ipe.

Mt. 5:17-19 17 No pensï¿¿ que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir. 18 Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasarï¿¿e la ley, hasta que todo se haya cumplido. 19 De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeï¿¿ y asï¿¿nseï¿¿ los hombres, muy pequeï¿¿erï¿¿ llamado en el reino de los cielos; mas cualquiera que los haga y los enseï¿¿ ï¿¿e serï¿¿lamado grande en el reino de los cielos.

Mt. 22:29 29 Entonces respondiendo Jesï¿¿es dijo: Errï¿¿, ignorando las Escrituras y el poder de Dios.

Mr. 13:31 31 El cielo y la tierra pasarï¿¿ pero mis palabras no pasarï¿¿

Lc. 16:17 16 La ley y los profetas eran hasta Juan; desde entonces el reino de Dios es anunciado, y todos se esfuerzan por entrar en ï¿¿

Jn. 2:22 22 Por tanto, cuando resucitï¿¿ entre los muertos, sus discï¿¿los se acordaron que habï¿¿dicho esto; y creyeron la Escritura y la palabra que Jesï¿¿bï¿¿dicho.

Jn. 5:24 24 De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me enviï¿¿ tiene vida eterna; y no vendrï¿¿ condenaciï¿¿mas ha pasado de muerte a vida.

Jn. 10:35 35 Si llamï¿¿oses a aquellos a quienes vino la palabra de Dios (y la Escritura no puede ser quebrantada),

Hch. 17:11 11 Y ï¿¿os eran mï¿¿nobles que los que estaban en Tesalï¿¿a, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriï¿¿o cada dï¿¿las Escrituras para ver si estas cosas eran asï¿¿sup>

Ro. 10:17 17 Asï¿¿ue la fe es por el oï¿¿ y el oï¿¿ por la palabra de Dios.

1Co. 2:13 13 lo cual tambiï¿¿hablamos, no con palabras enseï¿¿s por sabidurï¿¿humana, sino con las que enseï¿¿l Espï¿¿tu, acomodando lo espiritual a lo espiritual.

Col. 3:16 16 La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseï¿¿oos y exhortï¿¿oos unos a otros en toda sabidurï¿¿ cantando con gracia en vuestros corazones al Seï¿¿con salmos e himnos y cï¿¿icos espirituales.

1Ts. 2:13 13 Por lo cual tambiï¿¿nosotros sin cesar damos gracias a Dios, de que cuando recibisteis la palabra de Dios que oï¿¿eis de nosotros, la recibisteis no como palabra de hombres, sino segï¿¿ en verdad, la palabra de Dios, la cual actï¿¿en vosotros los creyentes.

2Ti. 2:15 15 Asï¿¿ue, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habï¿¿ aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra.

2Ti. 3:15-17 15 y que desde la niï¿¿has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvaciï¿¿or la fe que es en Cristo Jesï¿¿up> 16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y ï¿¿para enseï¿¿ para redargï¿¿ para corregir, para instruir en justicia, 17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.

1P. 1:23-25 23 siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre. 24 Porque: Toda carne es como hierba, Y toda la gloria del hombre como flor de la hierba. La hierba se seca, y la flor se cae;  25 Mas la palabra del Seï¿¿ permanece para siempre. Y esta es la palabra que por el evangelio os ha sido anunciada.

2P. 3:15-16 15 Y tened entendido que la paciencia de nuestro Seï¿¿es para salvaciï¿¿como tambiï¿¿nuestro amado hermano Pablo, segï¿¿ sabidurï¿¿que le ha sido dada, os ha escrito, 16 casi en todas sus epï¿¿olas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difï¿¿les de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como tambiï¿¿las otras Escrituras, para su propia perdiciï¿¿/span>

Ap. 1:2 2 que ha dado testimonio de la palabra de Dios, y del testimonio de Jesucristo, y de todas las cosas que ha visto.

Ap. 22:18 18 Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecï¿¿de este libro: Si alguno aï¿¿ere a estas cosas, Dios traerï¿¿obre ï¿¿las plagas que estï¿¿ escritas en este libro.

Las Escrituras declaran, de muchas formas diversas, que la Biblia es la Palabra de Dios y que su afirmaciï¿¿s clara e inteligible para cualquiera. La afirmaciï¿¿onstante de los escritores del Antiguo Testamento, los del Nuevo y del propio Jesucristo, es que la Biblia es la inspirada Palabra de Dios. Por ejemplo, el Salmo 19:7-11 declara que la Biblia es ciertamente la Palabra del Seï¿¿ y nombra seis perfecciones, con sus seis correspondientes transformaciones de carï¿¿er humano, que la Palabra cumple.

Sal. 19:7-11  7La ley de Jehovï¿¿s perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehovï¿¿s fiel, que hace sabio al sencillo. 8 Los mandamientos de Jehovï¿¿on rectos, que alegran el corazï¿¿El precepto de Jehovï¿¿s puro, que alumbra los ojos. 9 El temor de Jehovï¿¿s limpio, que permanece para siempre; Los juicios de Jehovï¿¿on verdad, todos justos.         10 Deseables son mï¿¿que el oro, y mï¿¿que mucho oro afinado; Y dulces mï¿¿que miel, y que la que destila del panal. 11 Tu siervo es ademï¿¿ amonestado con ellos; En guardarlos hay grande galardï¿¿/span> Jesucristo declarï¿¿e la Ley tiene que ser cumplida.

Mt. 5:17-18 17 No pensï¿¿ que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir. 18 Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasarï¿¿e la ley, hasta que todo se haya cumplido.

En Hebreos 1:1-2, no solamente se afirma que Dios hablï¿¿ el Antiguo Testamento a los profetas con palabra de Dios, sino que tambiï¿¿lo hizo Su Hijo en el Nuevo. La Biblia sï¿¿puede ser rechazada si se rechazan sus constantes afirmaciones de ser la Palabra de Dios.

He. 1:1-2 1 Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, 2 en estos postreros dï¿¿ nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyï¿¿redero de todo, y por quien asimismo hizo el universo

B. EVIDENCIA EXTERNA.

La Biblia no sï¿¿afirma y reclama para sï¿¿l ser la Palabra de Dios, sino que apoya estas afirmaciones por abundantes evidencias que han convencido con frecuencia incluso a los lectores mï¿¿escï¿¿icos.

1. La continuidad de la Biblia. Uno de los mï¿¿sorprendentes y extraordinarios hechos respecto a las Escrituras es que, aunque fueron escritas por mï¿¿de cuarenta autores que vivieron a lo largo de un perï¿¿o de mï¿¿de 1,600 aï¿¿ la Biblia es, no obstante, un Libro y no una simple colecciï¿¿e 66 libros. Sus autores proceden de los mï¿¿diversos lugares y situaciones de la vida; hay reyes, campesinos, filï¿¿os, hombres de Estado, pescadores, mï¿¿cos, eruditos, poetas y agricultores. Vivieron en diferentes culturas, en diferentes experiencias existenciales, y con frecuencia fueron completamente distintos en carï¿¿er. La Biblia tiene una continuidad que puede ser observada desde el Gï¿¿sis hasta el Apocalipsis.

La continuidad de la Biblia puede ser constatada en su secuencia histï¿¿a que comienza con la creaciï¿¿el mundo presente hasta la de los nuevos cielos y la nueva tierra. El Antiguo Testamento revela temas doctrinales tales como la naturaleza del propio Dios, la doctrina del pecado, la de la salvaciï¿¿ el programa y propï¿¿o de Dios para el mundo como un todo, para Israel y para la Iglesia. La doctrina estï¿¿rogresivamente presentada desde sus principios en forma de introducciï¿¿hasta su mï¿¿completo desarrollo. El tipo estï¿¿eguido por el antitipo, la profecï¿¿por su cumplimiento. Uno de los temas continuados de la Biblia es la anticipaciï¿¿presentaciï¿¿realizaciï¿¿ exaltaciï¿¿e la persona mï¿¿perfecta de la tierra y los cielos, nuestro Seï¿¿Jesucristo. El relato de tan fascinante Libro, con su continuidad de desarrollo, exige un milagro mucho mayor que la inspiraciï¿¿n sï¿¿isma. De acuerdo con esto, los creyentes de la Escritura , si bien reconocen la factura humana de varios de sus libros, su continuidad y su guï¿¿se deben a la inspiraciï¿¿el Espï¿¿tu Santo.

2. La extensiï¿¿e la revelaciï¿¿ï¿¿ica. En su manifestaciï¿¿e la Verdad , la Biblia es inextinguible. Al igual que un telescopio, se adentra en el universo desde las infinitas alturas y profundidades de los cielos, hasta la tremenda hondura del infierno y capta las obras de Dios desde el principio hasta el fin. Como un microscopio, revela los mï¿¿diminutos detalles del plan y el propï¿¿o de Dios y la perfectï¿¿ma obra de la creaciï¿¿Al igual que un estereoscopio, sitï¿¿todos los seres y objetos, tanto si estï¿¿en los cielos como en la tierra, en correcta relaciï¿¿los unos con los otros. Aunque muchos de los libros de la Biblia fueron escritos en los comienzos del conocimiento humano, en una ï¿¿ca en que sus autores ignoraban por completo los modernos descubrimientos, lo que ellos escribieron, sin embargo, no ha sido nunca contradicho por posteriores descubrimientos, y los antiguos escritos de la Escritura se hallan sorprendentemente adaptados a modernas situaciones. En el amplï¿¿mo contexto de su revelaciï¿¿la verdad bï¿¿ica alcanza horizontes insospechados que van mï¿¿allï¿¿el descubrimiento humano, alcanzando, como de hecho lo hace, desde la eternidad del pasado, a la eternidad del futuro, revelando hechos que sï¿¿Dios puede conocer. No existe otro libro en todo el mundo que haya intentado siquiera presentar la Verdad de un modo comprensible como lo hace la Biblia.

3. La influencia y publicaciï¿¿e la Biblia. Ningï¿¿ otro libro ha sido jamï¿¿publicado en tantas lenguas e idiomas, por y para tan diferentes pueblos y culturas, como la propia Biblia. Sus pï¿¿nas estï¿¿entre las primeras que fueron impresas cuando se inventaron las prensas de la moderna imprenta. Millones de copias de la Escritura han sido publicadas en todas las principales lenguas del mundo, y no hay una sola lengua escrita que no tenga, al menos, una porciï¿¿mpresa de la Biblia. Aunque los escï¿¿icos, como el francï¿¿Voltaire, infiel y herï¿¿co, han predicho con frecuencia que la Biblia quedarï¿¿relegada al olvido en el paso de una generaciï¿¿e incluso autores del siglo XX han pronosticado que la Biblia pronto serï¿¿un libro olvidado, lo cierto es que la Biblia continï¿¿blicï¿¿ose en nï¿¿ creciente y en mayor nï¿¿ de lenguas que antes. Otras religiones han sobrepasado a la Cristiandad en nï¿¿ de seguidores, pero no han sido capaces de ofrecer ninguna revelaciï¿¿scrita comparable a la Escritura. En nuestra ï¿¿ca moderna, la influencia de la Biblia continï¿¿ ritmo de difusiï¿¿ncesante. Para los no salvos es la ï¿¿espada del Espï¿¿tuï¿¿

Ef. 6:17 17 Y tomad el yelmo de la salvaciï¿¿y la espada del Espï¿¿tu, que es la palabra de Dios;  Y para los salvos es un poder efectivo, santificante y que limpia de toda mancha.

Jn. 17:17 17 Santifï¿¿los en tu verdad; tu palabra es verdad.

2Co. 3:17-18 17 Porque el Seï¿¿es el Espï¿¿tu; y donde estï¿¿l Espï¿¿tu del Seï¿¿ allï¿¿ay libertad. 18 Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Seï¿¿ somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espï¿¿tu del Seï¿¿

Ef. 5:25-26 25 Maridos, amad a vuestras mujeres, asï¿¿omo Cristo amï¿¿la iglesia, y se entregï¿¿a sï¿¿ismo por ella, 26 para santificarla, habiï¿¿ola purificado en el lavamiento del agua por la palabra,

La Biblia continï¿¿endo la ï¿¿ base divina para la ley y la moralidad.

4. El contenido de la Biblia. El carï¿¿er sobrenatural de la Biblia se aprecia en el hecho de que trata tan libremente con lo desconocido y, desde luego, incognoscible, como con lo que es conocido. Describe la eternidad en el pasado, incluyendo la creaciï¿¿ntes de que el hombre existiese. Se revelan la naturaleza y las obras de Dios. En las profecï¿¿ bï¿¿icas se manifiesta la totalidad del programa divino para el mundo, para Israel y para la iglesia, culminando en esta ï¿¿a, que es eterna. En cada materia presentada y descrita, sus declaraciones son decisivas, concretas y estï¿¿al margen del tiempo. Su naturaleza comprensiva ha hecho a sus lectores sabios en la verdad que se relata tanto en el tiempo como en la eternidad.

5. La Biblia como literatura. Considerada como obra literaria, la Biblia es tambiï¿¿algo supremo. No solamente contiene la historia grï¿¿ca, sino la profecï¿¿en detalle, la mï¿¿bella poesï¿¿y el drama, relatos de amor y de guerra, las especulaciones de la filosofï¿¿y cuanto se relaciona con la verdad bï¿¿ica. La variedad de la producciï¿¿e sus autores estï¿¿ontrastada por la multiplicidad de sus materias. Ningï¿¿ro libro de literatura tiene tantos lectores apasionados de todas las edades y de todos los grados de inteligencia y erudiciï¿¿

6. La autoridad sin prejuicios de la Biblia. El carï¿¿er humano de los autores de la Biblia , carece de prejuicios en favor del hombre. La Biblia registra y seï¿¿, sin vacilar, el pecado y la debilidad de los mejores hombres, y advierte grï¿¿camente a aquellos que confï¿¿ en sus propias virtudes de su condenaciï¿¿inal. Aunque escrito por humanos, es un mensaje de Dios hacia el hombre, mï¿¿bien que un mensaje del hombre para el hombre. Aunque algunas veces habla de cosas terrenales y de experiencias humanas, tambiï¿¿describe con claridad y autoridad cosas tanto de los cielos como de la tierra, visibles o invisibles; revelando hechos acerca de Dios, de los ï¿¿eles, los hombres, del tiempo y de la eternidad; de la vida y la muerte, del pecado y la salvaciï¿¿del cielo y del infierno. Semejante libro no podrï¿¿ haber sido escrito por el hombre -si hubiese tenido que elegir hacerlo, y aun de haber podido, nunca habrï¿¿querido hacerlo- al margen de la divina direcciï¿¿ Por tanto, la Biblia , aunque escrita por hombres, es un mensaje que procede de Dios, con la certeza, la seguridad y la paz que sï¿¿Dios puede proporcionar.

7. El carï¿¿er supremo de la Biblia. Por encima de todo lo dicho anteriormente, la Biblia es un libro sobrenatural que revela la persona y la gloria de Dios manifestada en Su Hijo. Tal persona, Jesucristo, jamï¿¿pudo haber sido la invenciï¿¿e un hombre mortal, ya que Sus perfecciones nunca podrï¿¿ haber sido comprendidas ni por los hombres mï¿¿sabios y santos de esta tierra. El supremo carï¿¿er de la Biblia estï¿¿ apoyado por su revelaciï¿¿el carï¿¿er supremo en la persona de Jesucristo.

Como consecuencia de la combinaciï¿¿e las cualidades sobrenaturales y procedentes del hombre que entran en la composiciï¿¿e la Biblia , puede observarse una similitud entre la Biblia como la Palabra escrita y el Seï¿¿ Jesucristo como el Verbo viviente. Ambas son sobrenaturales en origen, presentando una mezcla inescrutable y perfecta de lo que es divino y de lo que es humano. Ambas tambiï¿¿ejercen un poder de transformaciï¿¿obre aquellos que creen, e igualmente permitido por Dios como algo negativo y rechazado por los que no creen. Las perfecciones divinas, impolutas y en toda su grandeza que no sufre la menor disminuciï¿¿estï¿¿inmersas en ambos aspectos. Las revelaciones que muestra son igualmente tan simples como la capacidad mental de un niï¿¿y tan complejas como los infinitos tesoros de la divina sabidurï¿¿y el divino conocimiento, sostenidas por el Dios que las ha revelado.

Romans 10:21 "All day long I have held out my hands to a disobedient and obstinate people."

2 Chronicles 36:16 But they mocked God's messengers, despised his words and scoffed at his prophets until the wrath of the LORD was aroused against his people and there was no remedy.

Proverbs 29:1 A man who remains stiff-necked after many rebukes will suddenly be destroyed--without remedy.

Isaiah 65:2 All day long I have held out my hands to an obstinate people, who walk in ways not good, pursuing their own imaginations--

Isaiah 65:12 I will destine you for the sword, and you will all bend down for the slaughter; for I called but you did not answer, I spoke but you did not listen. You did evil in my sight and chose what displeases me."

Isaiah 66:4 so I also will choose harsh treatment for them and will bring upon them what they dread. For when I called, no one answered, when I spoke, no one listened. They did evil in my sight and chose what displeases me."

Jeremiah 7:13 While you were doing all these things, declares the LORD, I spoke to you again and again, but you did not listen; I called you, but you did not answer.

Jeremiah 9:6 You live in the midst of deception; in their deceit they refuse to acknowledge me," declares the LORD.

Jeremiah 35:17 "Therefore, this is what the LORD God Almighty, the God of Israel, says: 'Listen! I am going to bring on Judah and on everyone living in Jerusalem every disaster I pronounced against them. I spoke to them, but they did not listen; I called to them, but they did not answer.'"

Jeremiah 44:16 "We will not listen to the message you have spoken to us in the name of the LORD!

Zechariah 7:11 "But they refused to pay attention; stubbornly they turned their backs and stopped up their ears.

Zechariah 7:13 "'When I called, they did not listen; so when they called, I would not listen,' says the LORD Almighty.